IDENTIDAD, ARTE Y CULTURA

Freda Montaño, directora de la Escuela Integral de Arte, antes en San Telmo y ahora en Montserrat, difunde la cultura y la identidad afroamericana con espectáculos artísticos populares de excelente nivel y sigue en la búsqueda de recuperación para la memoria de la simbólica vivienda de Defensa 1464. Freda Montaño (57 años) es bailarina, directora de la Escuela Integral de Arte y del grupo Bejuco que formó en 1986, representante de los ecuatorianos en Argentina, activista de los afrodescendientes, actriz, poetisa y cantante. En 1993, tras destacarse en Ecuador y recibir una invitación del Ministerio de Educación y Cultura de Chile, comenzó a viajar por América Latina con la finalidad de rescatar los orígenes, los distintos estilos, ritmos y bailes de los afrodescendientes. Realizó una gira de pueblo en pueblo con la finalidad de “ir a lugares de asentamientos negros para transmitir lo nuestro y nutrirnos con la música y cultura de cada país. Siempre digo que un día estábamos en un hotel cinco estrellas y otro día estábamos estrellados”. Visitó Colombia, Brasil, Perú, Paraguay, Uruguay y Chile, hasta que llegó a la Argentina y después de recorrer distintas provincias en el interior, se estableció con la Escuela Integral de Arte primero en el Abasto, luego en Defensa 1464 -en una simbólica vivienda de San Telmo relacionada con la identidad de los afrodescendientes y cuya primera construcción data de 1820- y en septiembre del año pasado, se trasladó a una casona de Montserrat ubicada en Chile 1331. Allí recibió al presidente ecuatoriano Rafael Correa el 10 de diciembre, funcionan distintos talleres y los domingos hay espectáculos y comidas regionales. ¿Cuáles son las actividades que están realizando actualmente en la Escuela Integral de Arte? Hay talleres de danza clásica, danza árabe y capoeira, para niños y adultos. También hay de salsa y merengue, samba brasilera, yoga dinámico, Sheng-Jen-Chi (karate chino), pilates, teatro, pintura, reggaeton y técnicas afro. En diciembre comenzamos con las inscripciones (4381-1561) para nuevos talleres de tango, danzas afro, latin dan, elongación, percusión y hip hop. Por otra parte, el martes 22 de enero comienza un taller de danzas afrobrasileñas tradicionales, mitología yoruba, técnica y trabajo corporal, dictado por Isa Soares. ¿Además de los talleres qué otras actividades realizan? Se alquilan las salas para ensayos y eventos sociales y todos los domingos a partir del mediodía hacemos comidas ecuatorianas, que son acompañadas por un show. Vino a visitarnos el 10 de diciembre el presidente de Ecuador, Rafael Correa. Trabajamos siempre en la difusión de la cultura. Estamos con la Asociación de Afrodescendientes y con el Complejo Intercultural Afro. ¿Por qué se fueron de la casa de San Telmo de Defensa 1464? El 15 de junio nos tuvimos que ir de la casa de Defensa 1464, porque el dueño, -que anteriormente nos la había cedido en comodato- después nos hizo un juicio y nos desalojó. Luchamos mucho por seguir en esa casa, porque es un símbolo de la cultura de los negros. Allí vivieron nuestros antepasados esclavos. Nosotros queríamos que se reconozca ese espacio (que tiene un subsuelo donde se observan celdas subterráneas por donde podrían haber estado antepasados negros que desembarcaron en el Parque Lezama como esclavos provenientes de barcos franceses), como un lugar simbólico de la identidad negra y de San Telmo. Que allí funcione el Complejo Intercultural Afro, la Escuela Integral de Arte y un museo que cuente la historia de los negros. Pero el dueño no la quería alquilar. Primero pidió 250 mil dólares por la venta, después 500 mil y finalmente un millón de dólares, así que nos tuvimos que ir. Es una pena y vamos a seguir luchando por esa casa. Queremos que intervenga algún área vinculada al casco histórico, a cultura o a patrimonio, que continúen con las investigaciones del subsuelo y que sea un espacio de reconocimiento de los afrodescendientes. Antes de irnos unos documentalistas filmaron en la casa –sin luz eléctrica porque el dueño nos la cortó- y el documental que hicieron sobre el espacio de Defensa 1464 ganó en el Instituto de Cine de Ecuador entre más de 70 participantes y consiguió el dinero para continuar el proyecto. David hizo el documental y siempre me dice que lo va a finalizar con un final feliz cuando la casa se recupere para difundir la historia, la cultura y la identidad de los negros. También filmaron estudiantes de la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo un documental que se acaba de estrenar en diciembre. La lucha que dimos por la casa de Defensa no va a ser en vano. El embajador de Ecuador se comprometió en ir a la UNESCO para plantear la necesidad de no que no se destruya. En el subsuelo de la casona de Defensa 1460/4, el investigador Daniel Schavelzon filmó un programa que se transmitió en canal 7 sobre la historia de los negros en San Telmo. Afirmó que en construcciones de esas características, muchas veces se alojaban hasta el siglo XIX a los africanos esclavos procedientes de Africa, que llegaban en embarcaciones de compañías navieras que desembarcaban en donde actualmente es el Parque Lezama. Durante un tiempo investigó el subsuelo, pero por riesgo de derrumbe la investigación quedó a mitad de camino. Freda Montaño, quien deleitó a vecinos y visitantes de San Telmo en Defensa 1460/4, en la Plaza Dorrego, en el Centro Cultural Fortunato Lacámera, en el Centro Cultural Plaza Defensa y en el Parque Lezama con la alegría, la sensualidad y el erotismo del grupo Bejuco y con las danzas afro de otras agrupaciones que participaron en actividades organizadas por la Escuela de Arte Integral, buscó por todos los medios que se preserve la casona por su importancia histórica y cultural. Pidió apoyo a organizaciones barriales, al INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación), a la Secretaría de Cultura, a la Dirección General de Casco Histórico, a la Defensoría del Pueblo, a la embajada de Ecuador, entre otras instituciones. La importancia simbólica de la vivienda salió en distintos medios de comunicación, tanto alternativos como masivos, pero por ahora el resultado fue la valorización comercial de la vivienda sin importar otros aspectos vinculados a la identidad del Casco Histórico. Ahora Freda se encuentra en una vieja construcción de Montserrat ubicada en Chile 1331, que cuenta con una sala enorme, separada de un espacio para comidas regionales por una cortina. En el fondo hay un patio que está en refacción. En pocos meses con la colocación de algunas artesanías, la exhibición de cuadros sobre paisajes caribeños, la pintura de colores claros en las paredes y el acondicionamiento en general, la casa tomó un estilo y una identidad particular latinoamericana. ¿Cómo llegaron a Chile 1331? Estamos desde el 15 de agosto. No hay quejas de los vecinos, siempre nos trataron muy bien, siento que estoy en un lugar en que soy muy querida. Cuando llegamos este lugar estaba con fierros y vidrios en el piso, era muy frío. Poco a poco lo fuimos refaccionando. Un vecino pintor, Alejandro Torrado, nos donó cuadros que pintó para que podamos pagar el alquiler, también nos ayudó el embajador de Ecuador en Argentina, profesores, familiares y amigos. Queremos hacer un auditorio y aislar también el sonido para poder aprovechar mejor el espacio. El 7 de septiembre participamos en la semana de Montserrat con la Red Cultural de Montserrat. Hubo siete cuadras con zancos, títeres gigantes y muchos espectáculos. Nos han pasado cosas maravillosas. Una vez vino una señora de 80 años que cantó tangos a capella. Nos dijo: gracias, porque es el día más feliz de mi vida”. Otra vez una señora de 44 años me dijo: gracias por estar acá”. El 31 de diciembre quemamos un muñeco para despedir el año y festejamos en la casa y en la calle toda la noche, bailando hasta las siete de la mañana. Se acercaron muchos vecinos, el lugar estuvo lleno. Los espectáculos y las comidas regionales de los domingos también atraen, acá vino el presidente de Ecuador. ¿Cómo fue la experiencia el día que vino a la casa Rafael Correa, el presidente de Ecuador? Fue por una gestión del embajador, que estuvo acá cuando empezamos en agosto. El presidente no quería nada pomposo. El 10 de diciembre vino al mediodía, antes de la transición presidencial. Había más de 200 personas. Vino con su hija de 13 años y se sintió como en su casa. Correa me dice “mamá Freda”, agradeció por tener un pedacito de país acá. Estaba previsto que se quede 30 minutos, pero estuvo dos horas porque se sintió muy bien, con mucha confianza por los cuadros, la gente, la música y la comida. Cuando hablé en un momento dije “hoy es un día de gloria, no hay que cansarse de sembrar”, y fue reproducida la frase en los diarios de Ecuador. Antes que se vaya le cantamos la canción “adiós presidente”. ¿Cuáles son las próximas actividades? El 22 de enero empieza en esta casa un curso de danzas afrobrasileñas dictado por la compañera Isa Soares. El domingo 10 de febrero va a ver una movida de salsa, un espectáculo de son y sabor. Vamos a participar en el carnaval de Montserrat el 9 de febrero, está programado que haya gente de distintos países. Todos los domingos hay almuerzo con comidas regionales y un show y baile de música latinoamericana. La comida forma parte de una cultura. Trabajamos también con el Complejo Intercultural Afro y conseguimos financiación para tener próximamente una página web distintas organizaciones. Hay un camino marcado en la vida de uno, vamos a seguir luchando por conseguir que la casa de San Telmo de Defensa de 1464, pueda ser un espacio para todos los negros. Se calcula que aproximadamente 60 millones de africanos fueron expulsados de sus tierras vendidos como esclavos en la época colonial. 300 mil desembarcaron en el Puerto de Buenos Aires. El bejuco es una liana, una raíz difícil de arrancar que se enreda en los árboles. Para Freda y su grupo Bejuco, significa fortaleza, resistencia, unión, arraigo a las raíces. Descendientes de la diáspora, rescatan símbolos de la identidad, aportando a Montserrat y San Telmo, barrios marcados desde la época colonial por la negritud, pasión, alegría, arte y cultura.